lunes, 14 de julio de 2014

Bullying Ambiental o Eco-bullying

El Bullying Ambiental o Eco-Bullying es el maltrato deliberado y constante que recibe la naturaleza sin razón alguna, e implica una repetición continua de determinadas acciones y puede provocar graves daños a especies o individuos específicos.

El término viene del inglés "bully" que significa tirano o brutal y que al aplicarlo al medio ambiente denota un acto violento, intencional y repetido en contra de la naturaleza.

El Bulling Ambiental se puede presentar de varias formas:

  •       Agresividad, es decir, mediante actos violentos en contra de la naturaleza, que generalmente no tiene forma de defenderse como por ejemplo: cortando ramas u hojas de arboles sin razón alguna o tirando basura a propósito, el maltrato animal es otra forma muy específica de Eco-bulling. 
  •        Indiferencia: desperdiciando de forma consciente los recursos como el agua o la energía.

El Eco-bullying se hace generalmente en contra de algo que no puede defenderse a sí mismo, la víctima a menudo teme a los atacantes o agresores, ya que son violentos y opresivos, tienen un fuerte grado de control o dominio y presentan algún complejo de superioridad y no miden las consecuencias de sus acciones.


Todas estas formas de agresividad o tortura ambiental se presentan desde la infancia y permanecen en las personas al no tener un control, corrección y conciencia de sus actos. Inician arrancando una hoja de los árboles solo hacerlo, desmembrando insectos, arrojando piedras a los perros o los pájaros, etc. Y con el tiempo se van concretando en acciones mas impactantes, irresponsables o con alguna pseudo-justificación muy poco racional. Por ejemplo, tirar la basura o las colillas de cigarro en la calle, sólo porque “ya esta sucio”, “todos lo hacen”, o porque “después alguien barre”, es una conducta de agresión directa a la naturaleza con plena conciencia del acto.

¿Qué se puede hacer ante un acto de Eco-Bulling?

  1. Denunciar. Hacerle ver a la persona que lo que hace no es correcto o tiene una consecuencia negativa al entorno. Quien calla ante un acto de violencia también tiene un grado de culpabilidad y se vuelve cómplice del mismo.
  2.  Remediar el daño ocasionado. En caso de ser posible, tomar acciones para que el agresor restituya el daño ocasionado, esto además genera conciencia y promueve el que no se repita la conducta.
  3.  Concientizar. En ocasiones este tipo de actos suceden por no tener conciencia de las consecuencias de los actos, ya sea por la corta edad, falta de experiencia o por presentar alguna discapacidad ambiental [1]. La creación de conciencia dando razones y explicando los motivos es la forma sana de ir reduciendo este tipo de conductas, y tiene un mejor resultado que la prohibición.


¿Cómo prevenir el Bulling Ambiental?


1. Sensibilización. Desde el momento en que explicamos y damos con razones los motivos para evitar ciertos actos estamos previniendo futuras  agresiones. La mejor forma de hacerlo es poniendo el ejemplo y siendo responsable de nuestros actos midiendo las consecuencias de los mismos.

2. Legislando. Apoyando por ejemplo para que en la legislación los “delitos ambientales” sean tomados en cuenta, controlados y sancionados. Así tendremos un marco regulatorio que proteja y cuide a la naturaleza.

Como diría la maestra Gabriela Mistral: “Donde haya un árbol que plantar, plántalo tu. Donde haya un error que enmendar, enmiéndalo tú. Donde haya un esfuerzo que todos esquivan, hazlo tú. Se tú el que aparta la piedra del camino”.


[1] Discapacidad Ambiental: Término acuñado por el Ing. Pablo J. Monterrubio en 2013 que hace referencia a la pérdida de la conexión que debería existir entre los seres humanos y la naturaleza, que nos hace insensibles al ambiente natural y sus necesidades.